24 junio 2011

River, y el partido más importante de su historia

Por Marcelo Baffa


El domingo venidero River Plate jugará el partido más importante de su historia. Si, el más trascendente, el que nunca pensó que iba a jugar pero que lo tendrá que afrontar. El de la permanencia en primera división. El club más ganador de torneos argentinos, el que le dio mayor cantidad de jugadores a la selección nacional en toda la historia, el que paseó su fútbol por el mundo, el que tuvo a Amadeo Carrizo, a la Máquina, a Bernabé Ferreyra, a Alfredo Di Stéfano, a Angelito Labruna, a Enrique Omar Sívori, al Beto Alonso, al Enzo Fracéscoli y a tantos otros que lo hicieron tan grande, está a un partido de perder la categoría.



¿Quiénes son los responsables? Desde José María Aguilar, con la peor presidencia en la historia de la institución (nos referimos al segundo período de su gestión) hasta esta administración de Daniel Passarella, que luego de un año y medio no supo revertirla ni encausarla. Es cierto que Aguilar dejó al club en ruinas, pero también no es menos cierto que Passarella, con su sobervia y su autismo, sin escuchar a nadie y creyendo que con el solo hecho de llamarse River iba a zafar de esto, también es un gran responsable. Si se quiere, los porcentajes de responsabilidad son el 65 para Aguilar y el 35 para Passarella.


No nos olvidemos que desde aquella semifinal de la Copa Libertadores de 2005 ante Sao Paulo hasta nuestros dias, el club inició un proceso de descomposición y caída vertiginosa en lo social y deportivo.


No nos olvidemos que en River jugaron Cristian Alvarez, Diego Galván, Gabriel Loechbor, Leonardo Talamonti, Gustavo Oberman, Andrés San Martín, Juan Carlos Olave, Lucas Pusineri, el colombiano Juan Carlos Toja, Cristian Tula, Bernardo Leyenda, el uruguayo Marcelo Sosa, Juan Marcelo Ojeda, el colombiano Nelson Rivas, Mauro Rosales, Marco Ruben, Sixto Peralta, Nicolás Sánchez, Rolando Zárate, Rodrigo Archubi, Gustavo Cabral, Omar Merlo, el uruguayo Robert Flores, Martín Galmarini, Facundo Quiroga, Santiago Salcedo, Mariano Barbosa, Nicolás Navarro, Cristian Fabbiani, Gustavo Canales, el peruano Josepmir Bayón y hasta los dos paraguayos que llegaron como fantasmas (Cohene Mereles y Paniagua) y muchos otros nombres de jugadores que fueron contratados y que pasaron sin pena ni gloria por la institución, evidenciando que quienes manejaron el fútbol profesional de River, se equivocaron muy feo.


Tampoco podemos olvidar aquella guerra de los quinchos, o aquella batalla del playón, la inclusión de los barrabravas por parte de Aguilar a la vida política del club, blanqueando la complicidad de los barras con los dirigentes, ni a Gonzalo Acro y su crímen, ni a Alan Schlenker, ni a Adrian Rousseau. River: ¿Qué han hecho de ti?


A veces la vida es injusta. Si bien es cierto que el actual plantel carece de jerarquía para hacer honor a la historia; no menos cierto es que en esta temporada la campaña no fue del todo mala, ya que clasificó a la Copa Sudamericana, aunque no puede jugarla porque su promedio lo condenó a jugar la Promoción. Estos jugadores cargaron con la mochila de los promedios y de las malas campañas del Cholo Simeone (ultimo puesto), de Leonardo Astrada, de Néstor Gorosito y de Angel Cappa, hasta la llegada del negro J.J. López que agarró un fierro caliente y que parece haber perdido la brújula.


River está a 90 minutos de quedarse en primera, tal cual lo indica la historia o descender a la B Nacional, tirando a la basura 110 años de gloriosa existencia.


Espero que el domingo quienes jueguen contra Belgrano de Córdoba en el Monumental, dejen la vida (siempre hablando de la deportiva, claro) en el verde césped y que hagan honor a la historia.


Sinó, a partir del lunes otro será el escenario en River. Y si es así, habrá que atenerse a las consecuencias...


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