Una de las imágenes más insolitas de los últimos tiempos apareció en el partido Sunderland-Liverpool, partido que se recordará durante mucho tiempo por el gol local, el único del encuentro y que fue causa de la derrota donde juegan los argentinos.
Transcurría el minuto 5 del partido en el Stadium Of Light cuando Bent tiró al arco, la pelota impactó contra un globo rojo y desvió la trayectoria del disparo, despistando a Reina y originando el gol.
Según el reglamento, el árbitro del encuentro debió detener el partido y reanudarlo con un tiro neutral, pero no fue así. Un detalle gracioso de esta anécdota es que la pelota, luce un escudo del Liverpool, y fue arrojada aparentemente por un nene aficionado a los de Anfield.